Gernika-Lumo
Gernika-Lumo es una villa con encanto propio, con una historia única, con un patrimonio digno de destacar, con una sabrosa gastronomía y con un entorno natural que la convierten en uno de los municipios con más encanto de Urdaibai, Bizkaia y Euskadi.
Fundada en 1366 por Don Tello, cuya estatua preside la Plaza de los Fueros, su historia dio un brusco cambio cuando en 1937 sufrió un trágico bombardeo por parte de la aviación alemana, que destruyó el 90% de la localidad. Curiosamente importantes inmuebles, como la Casa de Juntas y el Árbol de Gernika o la Iglesia Santa María quedaron intactos. Desde entonces, Gernika-Lumo ha trabajado su reconstrucción desde el perdón, y muestra de ello es el Museo de la Paz que acoge la localidad para difundir la cultura de la Paz.
Gernika es símbolo de las libertades vascas por ser la cuna del Árbol de Gernika, y también es un municipio que guarda con orgullo sus tradiciones. Todos los lunes es el punto de encuentro de los baserritarras de la comarca, que acuden con sus mejores productos al mercado; el frontón Jai Alai es todo un emblema de la cesta punta; y el nombre Gernika va unido a auténticas delicias gastronómicas, como la alubia y el pimiento.